Bath es, sin lugar a dudas, una de las ciudades más bellas de Inglaterra y posee el honroso privilegio de ser la única ciudad del país declarada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
Fue desde la época isabelina hasta la época giorgiana un complejo termal para los más ricos. Antigua pero excelentemente conservada, Bath destaca por sus estrechas callejuelas, por su llamativa arquitectura en piedra y por ofrecer al viajero un sinfín de posibilidades.
Recomendamos visitar los manantiales de agua caliente que usaban los romanos, ver la gloriosa abadía de Bath, un antiguo edificio normando, claro ejemplo de la arquitectura gótica perpendicular de Inglaterra, dar un paseo en bote a lo largo del río Avon e incluso bañarse en las aguas termales de los manantiales naturales en el balneario de reciente construcción Thermae Bath Spa.
Y como no, perderse por sus calles, llenas de vida y de ambiente, sobre todo en verano cuando muchos músicos se echan a las calles ofreciendo un atractivo inigualable.
Está situada a 186 km. de Londres. Para realizar el trayecto en coche (unas 2h. aproximadamente) debéis seguir las indicaciones del mapa de abajo. Si preferís el autobús, hay que tomarlo en las estaciones de London Victoria, London Heathrow o London Gatwikck. Para ir en tren hay que partir desde la estación de Paddington.